Manejo de la diabetes y alimentos al salir de fiesta.


 2019-03-05

Cuando se vive con diabetes, las fiestas, de todos sus tipos podrían parecer un reto. Estas reuniones pueden convertirse en algo muy complejo pues hay alimentos altos en hidratos de carbono que aunque siempre podemos consumir tendrán sin duda alguna un impacto importante en nuestros niveles de glucosa en sangre. Está de más mencionar que se celebre lo que se celebre, estas reuniones normalmente incluyen alimentos, desafortunadamente poco, o nada saludables para nadie.

En mi familia por ejemplo, las fiestas son un tema culinario.  Claro, nos invitan a cenar y ¡santo cielo, yo que intento alimentarme sanamente! Debo confesar que no intento alimentarme de forma saludable porque vivo con diabetes sino porque en general procuro cuidar mi salud.  Hace poco, recibí una invitación para salir de fiesta con amigos, por supuesto estas reuniones incluyen alimentos deliciosos. Esta vez estoy más lista que nunca, porque cuando se vive con diabetes, necesitas un plan para salir de fiesta. Aquí te comparto mi estrategia y consejos para salir de situaciones donde me siento presionada por comer o beber cosas que están descartadas en mi plan de alimentación. 

¿No quieres beber? Intenta mi truco “medicamentos”

“¿Un tequila? no muchas gracias, estoy tomando medicamentos.” Ya sé, uno no debe mentir pero el truco “antibiótico” suele rescatarme especialmente cuando me siento presionada por beber . De hecho, tomar alcohol mientras se está consumiendo algún tipo de medicamentos puede ocasionar efectos secundarios como malestar estomacal, mareo y otros malestares.  En todo caso con frecuencia acepto, de haber en existencia, una cerveza light (que tiene menos calorías pero los mismos grados de alcohol). Ahora, si te sientes valiente, un caballito de tequila tiene bastantes menos kilocalorías (64 aproximadamente) pero no olvides que beber alcohol sí tendrá cierto efecto en tus niveles de glucosa en sangre. 

“No te preocupes, yo me sirvo” 

Encuentro platillos como el pastel, las pastas, el arroz, platillos fascinante. Generalmente el anfitrión intenta lucirse y sirve una porción tremendamente gigante en nuestros platos.  Si lo sirves tu mismo podrás asegurarte de que en tu plato haya menos carbohidratos y más proteínas, menos pasta y más ensalada.

“¡Dios mio que lleno estoy!”

En México decimos “fingir demencia” cuando nos hacemos, literalmente “los locos”. No hay nada más sencillo que fingir demencia con el mismo trago o con el mismo plato de comida. “¿Quieres más?” “No muchas gracias mira todavía lo que tengo  ya me serví dos veces”.

Contribuye en el menú.

Lleva a la reunión algo que puedas comer y que creas que el resto de los asistentes vaya a disfrutar. Si te ocasiona nerviosismo cocinar algo busca alguna opción en el SúperMercado. Comprendo que, si de tu bolso salieran tostadas horneadas los asistentes te mirarían extraño pero estoy segura de que puedes encontrar algo saludable y delicioso que puedas servir a tus amigos.  

“¡Yo traje el postre!” 

Por supuesto que siempre me ofrezco para llevar postres. La única razón que tengo para hacerlo es que así puedo obligar a todos a comer gelatinas light o algo con menor impacto en mis niveles de glucosa en sangre y el peso corporal del resto de los asistentes.

ESCRITO POR Mariana Gómez , PUBLICADO 03/05/19, UPDATED 12/05/22

Mariana fue diagnosticada con diabetes tipo 1 en el verano de 1985. Ella es psicóloga y educadora en diabetes. En 2008, Mariana comenzó un blog donde comparte su experiencia de vida con otros. Ella es una vocero por la diabetes tipo 1 en América Latina. Mariana trabajó con la Federación Mexicana de Diabetes hasta 2012. Ella es mamá de un jugador de fútbol americano adolescente. Vive en la Ciudad de México y ama los unicornios.