Combatiendo las disparidades de la diabetes entre la población hispana


 2021-07-07

La Cobertura de las Sesiones Científicas de la ADA es presentada por ADA x BT1 Collab.


 

El 26 de julio de 2021, David G. Marrero, PhD, director del Centro de Disparidades de Salud Fronteriza de la Universidad de Arizona, se presentó en el simposio “Diabetes through a Health Equity Lens” (“Diabetes a través de una lente de equidad en la salud”) en las 81ª Sesiones Científicas de la Asociación Estadounidense de Diabetes (ADA, por sus siglas en inglés). Su presentación se centró en la prevalencia de la diabetes en las comunidades hispanas y en la manera en que la integración de la atención adaptada a la cultura puede informar los resultados de salud y abordar las disparidades de la diabetes entre la población hispana.

David comenzó la presentación afirmando que el término hispano abarca muchos grupos étnicos diferentes. “Mucha gente trata a los hispanos como un grupo homogéneo de personas y ese realmente no es el caso”, dijo David.

La prevalencia de la diabetes varía según el grupo étnico:

  • 10.2 % en suramericanos
  • 13.4 % en cubanos
  • 17.7 % en centroamericanos
  • 18.0 % en dominicanos y puertorriqueños
  • 18.3 % en mexicanos

¿Qué Impulsa las Disparidades de la Diabetes en las Comunidades Hispanas? 

Desafortunadamente, una compleja interacción de factores contribuye a las disparidades de la diabetes observadas dentro de la comunidad hispana. La inseguridad alimentaria es uno de esos problemas. En 2014, el 22.4 por ciento de los hogares hispanos sufría de inseguridad alimentaria. La inseguridad alimentaria era mucho más frecuente entre los adultos hispanos que vivían en hogares encabezados por mujeres solteras con hijos y con ingresos por debajo del umbral de pobreza federal, o el 30.7 por ciento.

“En Arizona, se considera que uno de cada cuatro hogares latinos padece inseguridad alimentaria, en comparación con el 11 por ciento de los hogares blancos en la misma región”, dice David. Agrega que los hogares latinos gastan un tercio de sus ingresos en alimentos, la mayoría de los cuales son densos en calorías, bajos en fibra y altos en grasas, sodio y carbohidratos. Demasiados carbohidratos pueden hacer que los niveles de glucosa (azúcar) en sangre aumenten y los alimentos con alto contenido de grasas contribuyen a la obesidad, un factor de riesgo principal para la diabetes tipo 2.

Las barreras del idioma también impulsan las disparidades en la diabetes. “Sabemos que hay una discordancia de idioma, mucha gente viene y no habla inglés, lo que dificulta mucho más la negociación de los sistemas sociales, particularmente el sistema de salud en Estados Unidos”, explica David.

Junto con el estado migratorio de una persona, David dice que ser indocumentado puede limitar aún más la capacidad de una persona para tener acceso a una atención médica óptima o incluso adecuada. El 45 por ciento de los inmigrantes indocumentados no tenían seguro en comparación con menos de uno de cada diez ciudadanos.

Ser indocumentado significa que a la persona se le prohíbe tener un seguro médico económico como Medicare, Medicaid, el Programa de Seguro Médico para Niños (CHIP, por sus siglas en inglés) y los mercados de la Ley del Cuidado de la Salud a Bajo Precio (ACA, por sus siglas en inglés). Los resultados de la investigación muestran que existe una asociación directa entre el acceso a la atención y el manejo glucémico, lo que destaca la necesidad de una atención accesible y adaptada a la cultura.

Reduciendo las Disparidades de la Salud

David comparte que reducir las disparidades de la salud comienza con un seguro médico accesible. “Atención médica que esté disponible para todos, sin importar su origen étnico, su país de origen, su situación económica o su situación migratoria”.

Además, David hace un llamado a la necesidad de una educación adaptada a la cultura. “Entonces, esto va más allá de simplemente traducir al español las cosas que hemos usado para las personas de habla inglesa”, explica David. “Es necesario tener en cuenta los conceptos culturales procurando involucrar a los hispanos en las intervenciones de salud”.

Por ejemplo, los conceptos culturales comunes en la cultura mexicana incluyen:

  • Machismo: una adhesión a la hipermasculinidad hispana ligada a los hombres. Los comportamientos representativos pueden incluir la búsqueda de poder, el dominio y la desconexión emocional.
  • Familismo: obligaciones percibidas de ayudar a los miembros de la familia; dependencia del apoyo de la familia.
  • Caballerismo: comportamientos asociados con el honor, el respeto, la dignidad, la responsabilidad social, el cuidado de la familia y la conexión emocional.

David dice que comprender estos conceptos culturales puede ayudar a los proveedores a comprender ciertas decisiones de comportamiento e involucrar a los hispanos en los cambios de estilo de vida.

La reducción de las disparidades en la salud también requerirá soluciones que consideren la ubicación y el tiempo de entrega. “Muchas familias de origen mexicano en Tucson realmente no pueden tomarse un tiempo libre del trabajo. No tienen la capacidad de dividir económicamente parte de su día e ir a un centro médico”, dice David. “Es necesario que tengan acceso a información que no requiera que cambien su patrón de vida para ese día, semana o año”.

La Participación de las Promotoras para Aumentar la Equidad en Salud

Las intervenciones no serían posibles sin el apoyo de los trabajadores comunitarios de salud, también conocidos como promotores de salud. “Son vecinos, mamás, papás, niños, jóvenes y miembros de comunidades que creen en ayudar e incluir a otros a ser parte de la solución para crear un lugar más saludable para todos”, explica David.

Los promotores no solo encarnan el espíritu de su comunidad y cultura, sino que también sirven para crear relaciones y generar confianza. “Como resultado, los participantes hacen más que aprender sobre el manejo de su diabetes. Entienden los problemas, entienden los temas que les preocupan. Entienden las barreras que existen y pueden ayudar a las personas a evadirlas”, dice David.

David dice que integrar a los trabajadores de la salud de la comunidad y los conceptos culturales al campo de la atención médica revolucionará los modelos de prestación de atención para servir mejor y combatir las disparidades de la diabetes entre la población hispana.


 

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ESCRITO POR Kayla Hui, PUBLICADO 07/07/21, UPDATED 04/05/23

Kayla Hui es la reportera de salud de Beyond Type 1 que cubre la diabetes, las enfermedades crónicas y las inequidades en la salud. Recibió su Maestría en Salud Pública en la facultad de Salud Pública de la Universidad de Boston. Kayla ganó una beca de Pulitzer Center y un premio de la Fundación Slants en 2020 por su proyecto sobre la salud mental de los conductores de camiones inmigrantes chinos. Su trabajo publicado se puede encontrar en Healthline, Verywell Health, Pulitzer Center y más. Fuera del trabajo, a Kayla le gusta escalar, hornear y comprar plantas que no necesita. Puedes seguir a Kayla en Twitter en @kaylanhui.