Platicando con Beyond Type 2: Una Forma Distinta para Hablar sobre Obesidad
Esta vez charlamos sobre obesidad y diabetes y muchas otras cosas importantes que tienen que ver con nuestro estado de salud en general. Nos acompañó Rebeca Aguilar Pérez, quien licenciada en nutrición y salud pública y además tiene el diplomado de educadora en diabetes desde hace ya mucho tiempo y en diabetología. Hace poco terminó su especialidad en nutrición clínica con un enfoque en geriatría y actualmente se está certificando en psicología alimentaria.
BT2: El 4 de Marzo se observa el Día Mundial de la Obesidad. Platícanos en términos generales ¿Qué es la obesidad?
Rebeca: Fíjense que tenemos un mal concepto de la obesidad. En realidad, la obesidad únicamente es un exceso de acumulación de grasa en nuestro cuerpo, pero ¿qué creen? nada tiene que ver con la forma en la que una persona se ve físicamente.
A veces, damos por hecho que “ah, mira es que ella se ve un poco pasada de peso, pues seguramente es obesa o tiene sobrepeso”, pero los estudios o la evidencia clínica marca todo lo contrario. La evidencia dice que lo que hace a una persona obesa es este exceso de grasa que podemos tener y podemos tenerla normalmente, que le llamamos grasa visceral, a esta grasa que precisamente se encuentra alrededor de nuestros órganos, alrededor del corazón, alrededor de tus pulmones, de tu hígado y eso es lo que en realidad pone en riesgo a una persona.
A veces, podemos ver personas con un peso “normal”, entre comillas lo pongo porque muchas veces esas personas que vemos delgadas o con este peso normal pueden tener un porcentaje de grasa bastante elevado y si únicamente nos quedamos con su físico o su apariencia con un normopeso, pudiéramos pensar que ellas no tienen el mismo problema de salud que una persona que visualmente se ve un poco más gruesa, por así decirlo.
Es muy importante personalizar, individualizar y dejar este estigma de peso saludable y peso no saludable comparando nuestro cuerpo con el de otras personas ¿no?
Rebeca: Totalmente y ¿sabes por qué lo relacionamos de esa manera? Porque ¿recuerdan que hasta con el pediatra y los médicos nos calculaban el índice de masa corporal? O el IMC, que es la relación de nuestro peso con nuestra altura. Entonces, existen tablas para hombres, para mujeres, para niños y niñas incluso y, entonces, esa relación era lo que nos hacía o nos catalogaba tal vez como un peso normal o sobrepeso o diferentes grados de obesidad, pero la verdad es que ya ni siquiera se debería de usar. En los niños sí, pero ya los adultos ya no. Mejor analicemos la calidad de la composición corporal de cada uno de nosotros.
¿En qué aspecto y por qué es importante crear el énfasis en la obesidad?
Rebeca: Nuestro cuerpo suele acumular grasa en lugares que podemos, la manera más fácil de identificarla, aquella que tú puedes ver y tocar. Tocamos nuestros bracitos, nuestra barriga tal vez, las caderas. Entonces, esa forma parte de nuestra grasa, pero hay una grasa que no podemos ver ni tocar que es esta grasa que está entre las vísceras, la grasa visceral y que, como se encuentra precisamente alrededor de órganos vitales, y entonces, el riesgo de padecer la presión arterial elevada, que se eleve el colesterol o el riesgo también incluso de desarrollar diabetes se va a elevar con esta acumulación excesiva de grasa.
Vemos que en poblaciones jóvenes, en niños y adolescentes, hay mayores cifras de obesidad y de sobrepeso y más diabetes Tipo 2. ¿Por qué crees que esté pasando esto? ¿Cómo podemos orientar a las familias en ese sentido?
Rebeca: Mira, yo creo que se da un poquito más en los jóvenes porque, si te fijas, tenemos más acceso a una mayor variedad de alimentos. Tenemos también, sobre todo ahorita que estamos en pandemia, se va a ver un aumento en el peso de nuestros jóvenes, pero también yo creo que en la población de forma general, porque hemos disminuido la quema de calorías que habitualmente en nuestra vida tradicional estábamos realizando. Existimos profesionales en el área de la nutrición, no todos tenemos una forma de observar este estilo de vida de una forma más centrada, por así decirlo, poniendo sobre todo las emociones de enfrente sobre lo que solemos decidir, pero visitar un nutriólogo que nos pueda subir a una báscula, hacer plicometría que es medir esas áreas donde acumulamos un poco más de grasa, nos puede ayudar a conocer nuestro estado nutricional y poder tomar medidas para mejorar ciertos aspectos de nosotros.
¿Consideras que estos son como el primer paso que necesitas dar para la pérdida de peso?¿Hay una secuencia progresiva para lograr esa pérdida de peso y de una forma saludable?
Rebeca: Sí, Eugenia. Eso que estás comentando es súper súper súper importante. Si se fijan, hablamos de las emociones y no puedo dejar a un lado la palabra placer a la hora de hablar de los factores que tenemos que considerar. Hay que recordar que todos los humanos necesitamos una dosis de calorías, de placer en nuestra vida para poder hacer las cosas. Dudo mucho que tuvieras un par de zapatos súper incómodo y que lo quisieras usar por muchos años o por muchos meses. En el estilo de vida es exactamente igual. No debemos de perder el placer de lo que nos gusta o lo que disfrutamos. Creo yo que lo más importante es acudir con una persona que tenga esta forma de pensar, donde valore tus emociones y tu placer en cuanto a hacer un plan de alimentación hecho para ti, no para el montón, no esos planes de alimentación que a veces ya se tienen hechos y que se reparten como si fueran barajitas sin importar este punto tan importante que es que lo disfrutes, que sea placentero. ¿Sabes por qué?, porque el objetivo es que lo podamos sostener por muchos años.
¿Con qué tipo de especialista sugerirías tú que se acercara una persona diagnosticada con diabetes Tipo 2 que además sabe que necesita perder peso? ¿Qué tipo de experto debe consultar?
Rebeca: Aparte de su educador en diabetes que es súper importante para esta formación porque recordemos que saber ayuda. El saber es un abrir puertas maravillosas, pero también sería así como que el paquete ideal o el combo ideal que tu educador en diabetes también tuviera conocimientos de nutrición.
Para consultar a Rebeca puedes encontrarla en el Centro Médico Inglés en el cuarto piso, consultorio 405. Su correo electrónico es [email protected] y el teléfono es el 81 8346 2560.
