Tabaquismo y diabetes: información para nuestra salud


 2020-02-24

Todos sabemos, o al menos hemos escuchado o leído, sobre lo nocivo que resulta el hábito de fumar. Las advertencias vienen incluso reflejadas gráficamente en los paquetes de cigarros. Algunos de los efectos más conocidos son: el cáncer en los pulmones, boca, garganta y vejiga además de disminuir la cantidad de oxígeno que llega a los tejidos pudiendo provocar infartos y eventos vasculares cerebrales y periféricos.

Diabetes tipo 2 y complicaciones

Para quienes vivimos con diabetes, el fumar también aumenta el riesgo de desarrollar complicaciones graves como:

  • Enfermedades cardiacas y renales. Las personas con diabetes que fuman tienen tres veces más probabilidades de tener una enfermedad cardiovascular que aquellas personas con diabetes que no fuman.
  • Mala circulación de las extremidades tanto inferiores como superiores pudiendo causar infecciones, llagas y mayor riesgo de amputaciones debido a la afectación en los vasos sanguíneos impidiendo que exista una adecuada circulación de la sangre.
  • Retinopatía.
  • Neuropatía periférica.
  • En mujeres embarazadas el riesgo a que el bebé tenga daños y existan problemas como hipertensión antes o en el momento del parto.

Si vives con diabetes y fumas es necesario que sepas que el dejar de fumar tiene beneficios inmediatos que se ven reflejados en un mejor control de tus niveles de glucosa en sangre ya que el fumar incrementa la resistencia a la insulina dificultando el adecuado manejo de la diabetes.

Algunas estrategias

Pero como decirte todo lo dañino que es el fumar no es suficiente, aquí te compartimos algunas estrategias que te podrán apoyar en tu misión para dejar de fumar:

  • Reconocer que el fumar es una adicción y que hay que tratarla como tal. Si bien, a algunas personas les puede funcionar el decidir dejar de fumar de un día para otro no tiene que ser así en todos. El fumar puede ir atado a ciertas situaciones que se presentan día a día como el estrés y el fumar un cigarrillo pueda ir asociado con una forma de relajación. La idea es identificar qué es aquello que te mueve a fumar (el tráfico, el ir o regresar del trabajo o incluso las mismas exigencias del manejo de la diabetes), una vez identificado podemos buscar sustituir el cigarro por alguna actividad saludable como tomar agua.
  • ¿Disminuir cantidad? Si no puedes dejar de fumar de golpe quizá puedas disminuir la cantidad de cigarros que fumas al día y así, poco a poco ir dejándolo sin que ello te genere más estrés.
  • Buscar apoyo con un especialista. Existen terapias con hipnosis que ayudan a disminuir la ansiedad y con ello las ganas de fumar.
  • Conocer los síntomas que se tendrán al dejar de fumar tales como: deseos de nicotina, ansiedad, tensión, irritabilidad, dificultad para concentrarse, alteraciones en el sueño, dolores de cabeza e incremento del apetito. Al conocer previamente estas sensaciones podemos tomar acciones para que su intensidad no sea tan fuerte.
  • Crea una lista. Realiza una lista de las razones por las cuales quieres dejar este hábito e incluye los beneficios que esto te traerá tanto a corto como a largo plazo.
  • Busca apoyo de tus seres queridos. Platica con tu familia, amigos e incluso compañeros de trabajo para que conozcan y te apoyen en este nuevo proyecto de salud que tienes para ti.
  • Día a día. Al inicio cada día será un logro y poco a poco podrás ver que han pasado más días sin fumar y ello te motivará a continuar sin hacerlo.
  • Realiza ejercicio. El ejercicio libera sustancias que producen bienestar y sustituyen aquello que pensabas que el cigarro te brindaba.

Además de todo lo anterior, si conoces a alguien que no vive con diabetes pero fuma podría ser que le interese saber que el fumar puede ocasionar que desarrolle diabetes.

Riesgos para quienes no viven con diabetes

Así es, las personas que fuman tienen entre 30 y 40% más probabilidad de desarrollar diabetes tipo 2 que aquellos que no fuman. Y no solo eso, mientras más cigarrillos fumen mayor es el riesgo de desarrollar este tipo de diabetes.  Esto debido a que el fumar incrementa los niveles de glucosa en sangre y aunado a que, además, incrementa la resistencia a la insulina. Por lo que, de existir predisposición a la diabetes el fumar aceleraría este proceso.

 

ESCRITO POR Eugenia Araiza, Educadora en Diabetes, Nutróloga, PUBLICADO 02/24/20, UPDATED 01/20/23

Eugenia es Nutrióloga y Educadora en Diabetes. Ella vive con diabetes tipo 1 desde 1995. En 2019, comenzó Healthy Diabetes, un proyecto que incluye recursos educativos para apoyar y empoderar a las personas que viven con diabetes. Es autora del libro “Soy diferente y me gusta” que aborda el tema de la aceptación cuando se vive con Diabetes.