La dieta cetogénica en niños con diabetes conlleva riesgos


 2023-09-25

Puntos destacados

  • La Academia Americana de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés) publicó nuevas pautas sobre la dieta cetogénica en niños con riesgo de diabetes o con diabetes.
  • La AAP expresó su preocupación por la desaceleración del crecimiento, las deficiencias nutricionales, la mala salud ósea, la cetosis nutricional y los trastornos alimentarios en los niños.
  • El comité de nutrición de la AAP fue un paso más allá, ya que advirtió sobre la dieta cetogénica en niños que viven con diabetes tipo 1 (a menos que estén bajo estricta supervisión de su equipo de atención clínica).
  • La evidencia es menos clara sobre los efectos de la dieta cetogénica en niños con diabetes tipo 2.
  • En cambio, el comité recomienda reducir el consumo de carbohidratos bajos en nutrientes, como galletas, pasteles y dulces.

El 18 de septiembre de 2023 la Academia Americana de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés) publicó nuevas pautas sobre la dieta cetogénica y otras dietas extremadamente bajas en carbohidratos para niños con riesgo de diabetes o con diabetes.

Esta forma de alimentación muy baja en carbohidratos ha ganado popularidad en los últimos años, pero puede representar un riesgo para los niños.

La importancia de la nutrición para el manejo de la diabetes

La nutrición, específicamente darle seguimiento y manejar la cantidad de gramos de carbohidratos que consumes, puede ser un componente crítico para el manejo de la diabetes tanto en niños como en adultos.

Para algunas personas, el delicado equilibrio entre la nutrición y el manejo de la diabetes puede crear una relación conflictiva con la comida. Pero al igual que los medicamentos y el ejercicio, parte de vivir con diabetes puede significar medir y tomar en cuenta el tipo y la cantidad de alimentos que consumes diariamente.

Dado que las personas con diabetes no pueden procesar adecuadamente la glucosa de los alimentos (lo que requiere inyecciones de insulina u otros medicamentos para la diabetes), es necesario contar cuidadosamente los carbohidratos ya que tienen el mayor impacto en los niveles de glucosa en sangre y la A1c.

Sin embargo, los carbohidratos son la fuente de energía predilecta del cuerpo, lo que hace que las dietas bajas en carbohidratos sean un tema muy mencionado en la comunidad de diabetes y de atención médica.

El auge de la alimentación baja en carbohidratos

Ya que el exceso de carbohidratos puede causar niveles altos de glucosa en sangre, es comprensible que algunas personas quieran limitar la cantidad de carbohidratos que consumen en un día. Algunas personas con diabetes creen que comer menos carbohidratos puede facilitar el manejo de la glucosa en sangre.

Muchas personas han comenzado a adoptar distintas versiones de la dieta cetogénica, una dieta en la que se limita severamente la cantidad de azúcar y carbohidratos que se consumen al día. De hecho, el siete por ciento de los estadounidenses afirman comer alimentos bajos en carbohidratos, en comparación con el cinco por ciento en 2018.

La alimentación baja en carbohidratos puede ser diferente para cada persona:

  • Se considera que una dieta es baja en carbohidratos cuando menos del 26 por ciento del total de calorías diarias está compuesto de carbohidratos.
  • Se considera que es muy baja en carbohidratos cuando contiene entre 20 y 50 gramos de carbohidratos por día.
  • Se considera cetogénica si consumes menos de 20 gramos de carbohidratos por día.

Compara esto con las pautas dietéticas para los estadounidenses que recomiendan que los carbohidratos representen entre el 45 y el 65 por ciento del total de calorías diarias, lo que para la mayoría de las personas es entre 225 y 325 gramos de carbohidratos por día.

Tasas crecientes de diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2 en personas más jóvenes

A medida que la incidencia y prevalencia de la diabetes tipo 1 y la diabetes tipo 2 siguen en aumento, es comprensible que las personas busquen dietas bajas en carbohidratos y cetogénicas como opciones de tratamiento tanto para los niveles de glucosa en sangre como para el manejo del peso, especialmente en los adultos.

Se ha descubierto que la dieta cetogénica mejora los niveles de A1c en adultos con diabetes si la dieta se sigue durante 90 días o más.

Un estudio de dos años descubrió que los adultos con diabetes tipo 2 que seguían la dieta cetogénica perdieron un promedio de 26 libras durante el período del estudio. Además, otro estudio determinó que la dieta cetogénica ayudó a mejorar la sensibilidad a la insulina en un 75% de los participantes.

Con los beneficios demostrados en adultos, es comprensible que a medida que las tasas de diabetes tipo 1 y de diabetes tipo 2 aumentan en los niños, también estén interesados ​​en dietas bajas en carbohidratos.

Hay menos datos pediátricos, pero los adolescentes con diabetes tipo 2 que siguieron una dieta cetogénica durante al menos 60 días experimentaron una remisión de la diabetes a corto plazo y una disminución del índice de masa corporal (IMC).

Sin embargo, estas severas restricciones dietéticas pueden estar asociadas con consecuencias físicas, metabólicas y psicológicas, incluido el riesgo de trastornos alimentarios en niños y adolescentes, que es aún mayor para aquellos con diabetes.

La AAP en cambio recomienda un enfoque más equilibrado.

Recomendaciones de la AAP

El comité de nutrición de la AAP comprende la popularidad de las dietas bajas en carbohidratos para manejar los niveles de glucosa en sangre y el peso, especialmente en las comunidades con diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2.

Sin embargo, debido a que no existen estudios sobre los efectos de la dieta cetogénica en niños y jóvenes de 2 a 18 años con diabetes, advierten a padres y pediatras que no la recomiendan para sus hijos y pacientes.

El comité advierte que limitar severamente los carbohidratos en la dieta de un niño puede retrasar el crecimiento, provocar deficiencias nutricionales, contribuir a una peor salud ósea, causar cetosis y contribuir a trastornos alimentarios.

Sin embargo, están de acuerdo en que aumentar la fibra dietética y reducir los carbohidratos ultraprocesados como las gaseosas, los dulces, las galletas y otros postres empaquetados puede contribuir a mejorar los niveles de glucosa en sangre y la salud en general.

El comité recomienda que los carbohidratos deben proporcionar entre el 45 y el 65 por ciento de las necesidades energéticas de un niño y que no más del 10 por ciento de las calorías diarias provengan de azúcares añadidos.

Se recomienda que la mayoría de los carbohidratos de la dieta de un niño provengan de:

  • frutas
  • verduras
  • cereales integrales
  • legumbres
  • productos lácteos

La atención debe centrarse en reducir el consumo infantil de refrigerios procesados bajos en nutrientes y bebidas con azúcares añadidos, lo cual es un estándar saludable para todos los niños, pero especialmente para los niños que corren riesgo de tener diabetes o que viven con diabetes o prediabetes.

El informe agrega que eliminar las bebidas y los jugos azucarados mejora significativamente los niveles de glucosa en sangre y ayuda a manejar el peso, cuando la pérdida de peso está indicada para el niño.

Dónde encontrar más información

La comida puede resultar complicada, especialmente cuando se vive con diabetes. Si tienes preguntas o inquietudes sobre lo que tu hijo puede comer si tiene o está en riesgo de tener diabetes, consulta los siguientes recursos y habla con tu médico:

¡Hay toda una comunidad de padres y madres de niños y jóvenes que viven con diabetes que también pueden apoyarte!

ESCRITO POR Christine Fallabel , PUBLICADO 09/25/23, UPDATED 09/25/23

Christine Fallabel vive con diabetes tipo 1 desde el año 2000. Es escritora de salud y ciencias, con publicaciones en Diabetes Daily Grind, diaTribe, Insulin Nation, Diabetics Doing Things y columnas periódicas en Diabetes Strong y Healthline. Tiene una maestría en salud pública de Temple University. En su tiempo libre disfruta de realizar largas caminatas con su marido en las montañas de Colorado, juguetear con su bomba de insulina DIY, beber café y disfrutar un buen libro frente a la chimenea.