La Diabetes Tipo 2 Es Más Que Sólo Tu A1C


 2022-03-04

Cuando vives con diabetes tipo 2, es probable que estés acostumbrado a que tu médico ordene análisis de laboratorio cada tres meses para medir tu A1c. Mientras esperas tus resultados, es probable que tengas la esperanza de que todos los cambios que has hecho y los hábitos más saludables que has desarrollado hayan valido la pena y hayan tenido como resultado una A1c más baja.

Pero aquí hay algunas preguntas: ¿Qué sucede si tu A1c no es tan baja como esperabas? O, ¿si no es para nada baja? ¿Qué pasa si está fuera de rango o incluso más alta de lo que esperabas?

¿Crees que la atención y el manejo exitoso de la diabetes sólo se reflejan en tu A1c? Muchas personas con diabetes tienden a pensar en sus lecturas de A1c como una prueba final, pero se necesita mucho más para vivir bien con diabetes tipo 2. Si bien tu A1c sin duda es importante, no es el único factor que debes tener en cuenta cuando reflexionas sobre tu progreso.

COSAS APARTE DEL A1C QUE DEBES TENER EN CUENTA

Tu salud física, mental y emocional son importantes cuando tratas de vivir bien con diabetes. Estas son algunas cosas que debes tener en cuenta:

Salud física

  • salud cardiovascular (presión arterial, colesterol y triglicéridos)
  • salud ocular
  • salud renal
  • hábitos de ejercicio
  • tiempo en rango
  • hábitos de sueño

Salud mental y emocional

  • ansiedad y depresión
  • estrés
  • relación con la comida
  • perspectivas sobre la calidad de vida
  • relaciones con los demás
  • relación contigo mismo

SALUD FÍSICA

Salud cardiovascular: La diabetes aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Para reducir tu riesgo, vigila tu presión arterial, colesterol y triglicéridos. La presión arterial alta, el colesterol y los triglicéridos aumentan las posibilidades de sufrir un derrame cerebral, un ataque cardíaco y una enfermedad cardíaca. Dependiendo de tus cifras, tu médico podría sugerirte una receta de estatina, un inhibidor de la ECA, BRA, bloqueadores de los canales de calcio y otros medicamentos utilizados para tratar la presión arterial alta, el colesterol y los triglicéridos. Si nunca te has hecho este análisis de laboratorio, asegúrate de solicitarlo a tu proveedor de atención médica. Encuentra más información sobre cómo proteger tu corazón mientras manejas la diabetes tipo 2 consultando nuestros recursos de salud cardíaca aquí.

Salud ocular: No importa qué tan bien estés cuidando de tu diabetes, aun así es necesario hacerte exámenes de la vista anuales para detectar cualquier cambio en tu vista y prevenir complicaciones oculares. Las personas con diabetes tipo 1 y tipo 2 tienen un mayor riesgo de desarrollar complicaciones oculares. Cuanto antes detecte tu médico problemas oculares, podrá hacer más para ayudarte a evitar que progresen. Las condiciones médicas como el edema macular y la retinopatía son dos de las principales causas de ceguera. Lee esta entrevista con un oftalmólogo sobre por qué todas las personas que viven con diabetes deben someterse a pruebas de detección de complicaciones oculares, incluso si tu A1c está por debajo del 7 por ciento.

Salud renal: La función de los riñones es filtrar el agua y los desechos de la sangre, para después excretar esos desechos por medio de la orina. Esto también ayuda a mantener niveles saludables de presión arterial. Los niveles crónicamente altos de glucosa (azúcar) en sangre y de presión arterial pueden dañar la capacidad de los riñones para filtrar los desechos adecuadamente. Esto lleva a la acumulación de desechos en tu cuerpo. La enfermedad renal tarda mucho en desarrollarse, por lo que es posible que no notes ningún síntoma hasta que haya alcanzado fases más profundas. Las señales y los síntomas reveladores de esta afección incluyen orina frecuente, hinchazón en los tobillos y las piernas y presión arterial alta. La mejor manera de saber si estás desarrollando una enfermedad renal es haciéndote análisis de sangre con regularidad con tu médico, esas citas periódicas son importantes. Esto enfatiza la importancia de hacerte chequeos anuales con tu proveedor de atención primaria.

Ejercicio: Para que conste, el ejercicio podría fácilmente caer en las categorías de bienestar mental y emocional debido a que puede aliviar el estrés y la ansiedad. El ejercicio también ayuda a que los músculos respondan mejor a la insulina; en otras palabras, el ejercicio mejora la sensibilidad a la insulina y reduce la resistencia a la insulina. Si no has estado haciendo ejercicios por un tiempo, facilítate volver a hacerlo. Haz algo que disfrutes y no te presiones para hacer demasiado a la vez. Por ejemplo, es posible que sólo quieras comprometerte a caminar dos veces al día o, en lugar de unirte a un gimnasio, participar en clases grupales. Los pequeños pasos pueden llevar a un gran progreso. Compara tu progreso solamente contra ti mismo. Tratar de estar a la altura de los niveles de ejercicio más avanzados desde el principio puede predisponerte al fracaso o al síndrome de burnout. Celebra las pequeñas victorias: cada paso que das es valioso. Consulta nuestros otros consejos de ejercicio para manejar la diabetes tipo 2 aquí.

Tiempo en rango: El tiempo en rango (TIR, por sus siglas en inglés) ​​es una métrica que está ganando mucho favor sobre la A1c. Puedes considerar la A1c y el tiempo en rango como métricas complementarias para llevar un seguimiento de tu progreso. El tiempo en rango mide la cantidad de tiempo que pasas entre las cifras de glucosa (rango) establecidas por ti y tu médico. Esta es una función que se utiliza en los monitores continuos de glucosa (MCG). El TIR es una medida efectiva porque te muestra una imagen precisa de tus niveles de glucosa a lo largo del tiempo. Mientras que la A1c sólo captura tu glucosa promedio durante los tres meses anteriores. No te muestra con qué frecuencia experimentas niveles de glucosa altos o bajos. El objetivo estándar para la TIR es pasar el 70 por ciento del tiempo entre 70 y 180 mg/dL. Esto corresponde a una A1c de alrededor del 7 por ciento.

Hábitos de sueño: ¿Alguna vez sientes que no descansas lo suficiente por la noche? Tus niveles de glucosa podrían tener algo que ver con esto. La glucosa alta puede dificultar el sueño y puede ser un factor para sentirte fatigado al día siguiente. Además, el sueño puede afectar la capacidad de sentirte lleno y afectar las hormonas del hambre. No dormir lo suficiente puede hacer que sea más probable que disfrutes de alimentos con un alto contenido de azúcar, grasas y calorías. Los efectos a largo plazo de la falta de sueño incluyen el trastorno del sueño inquieto y la apnea del sueño. Duerme lo suficiente manteniendo horarios constantes para acostarte, tomando medicamentos nocturnos, haciendo ejercicio con regularidad y evitando la cafeína por la noche.

SALUD MENTAL Y EMOCIONAL

Ansiedad, depresión y estrés: Las personas con diabetes tienen más probabilidades de sufrir ansiedad y depresión, y la diabetes puede ser una enfermedad agobiante y estresante. Si bien la diabetes sin duda no significa que tu vida haya terminado, la rutina diaria de manejo puede llevarte al síndrome de burnout por la diabetes. El síndrome de burnout por la diabetes es cuando te sientes cansado de manejarla y desarrollas una sensación de desesperanza sobre tu vida con ella. El miedo a las complicaciones u otras preocupaciones relacionadas con la diabetes también son señales de angustia por la diabetes. Si te sientes abrumado o atrapado en tu rutina con la diabetes, prueba estos consejos de cuidado personal. Además, considera buscar un proveedor de salud mental que trabaje con personas con diabetes.

Perspectiva sobre la calidad de vida: Pregúntate lo siguiente: ¿Cómo ves el alcance de tu vida y tu futuro? Si bien todos tenemos altibajos, ¿puedes decir que tu vida está llena principalmente de momentos positivos y edificantes? Si te sientes positivo sobre el estado actual de tu vida y hacia dónde se dirige, procura aplicar esa actitud también a tu rutina de autocuidado de la diabetes. Ese optimismo puede hacer que lidiar con los retos de la diabetes sea más fácil.

Relación con la comida: La comida es un componente importante para vivir con diabetes, y probablemente sea la parte más importante para algunos. Se supone que la comida debe ser una experiencia agradable, especialmente porque está en el centro de muchas interacciones sociales. Sin embargo, la diabetes puede hacerte dudar de lo que “debes” y “no debes” comer, lo que hace que las decisiones al respecto sean más complejas y retadoras. Algunos incluso podrían sentirse culpables por permitirse ciertos alimentos. Otros podrían sentirse frustrados porque incluso después de tomar decisiones saludables, sus niveles de glucosa aún no están donde ellos quisieran. Todos estos factores pueden afectar tu relación con la comida. Afortunadamente, hay maneras de disfrutar de los alimentos que te encantan, incluso si tienes que hacer algunos ajustes para hacerlo. Comienza a disfrutar nuevamente de tu relación con la comida consultando nuestros 11 consejos de nutrición y nuestra guía sobre cómo disfrutar de tus comidas favoritas con diabetes.

Relación con los demás: No es necesario lidiar con la diabetes por tu cuenta, de hecho, no debes lidiar con la diabetes por tu cuenta. Rodéate de personas que te animen y en quienes puedas confiar con seguridad sobre tus luchas contra la diabetes. Esto puede incluir hablar con un amigo sobre cómo seguir una rutina diseñada para mejorar tu salud. También podría incluir hablar con un proveedor de atención médica de confianza sobre tus temores en torno a las complicaciones, o con un familiar o pareja sobre los retos financieros que presenta la diabetes. Sin importar la persona que elijas para estar en tu círculo íntimo, asegúrate de que estas personas estén presentes para alentarte y tener en cuenta lo que es mejor para ti. Mantente alejado de aquellos que usan la culpa, la vergüenza o los estigmas asociados con la diabetes tipo 2 para “mostrar apoyo”.

Relación contigo mismo: La relación más importante que tendrás es la que tienes contigo mismo. Nadie puede manejar tu diabetes por ti, e incluso si tienes el apoyo de muchos, no importará mucho a menos que te des prioridad a ti mismo. Esto significa aprender a ser tu propio defensor cuando sea necesario, asegurarte de cuidar tu salud mental y emocional, priorizar la actividad física y encontrar formas saludables de manejar el estrés. La persona que mejor te conoce eres tú mismo. Solo tú puedes darte el mejor apoyo. Tu círculo íntimo existe para complementar lo que te das a ti mismo. ¡Ponte a ti mismo primero!

Pensar en tu diabetes de manera integral puede ayudarte a ver mejoras con el tiempo. Esperamos que este artículo te haya ayudado a ver el manejo de tu diabetes tipo 2 más allá de tu A1c.


El contenido educativo relacionado con la diabetes tipo 2 es posible gracias al apoyo de Lilly Diabetes. Beyond Type 2 mantiene un control editorial completo de todo el contenido publicado en nuestras plataformas.

ESCRITO POR T'ARA SMITH, MS, EDUCACIÓN NUTRICIONAL, PUBLICADO 03/04/22, UPDATED 03/07/22

T'ara fue diagnosticada con diabetes tipo 2 en julio de 2017 a la edad de 25 años. Desde su diagnóstico, centró sus estudios académicos y su carrera en concientizar sobre la diabetes y en vivir una vida plena con ella. Está emocionada de haberse unido al equipo Beyond Type 1 para continuar su trabajo. Dos años más tarde, T'ara descubrió que había sido diagnosticada erróneamente con diabetes tipo 2 y en realidad tiene LADA. Fuera de la oficina, a T'ara le gusta ir al cine, visitar parques con su perro, escuchar BTS y cocinar increíbles comidas saludables. T'ara tiene una maestría en educación nutricional de la American University.